La cantidad total de dinero que tienes a mano para jugar al póquer se conoce como tu bankroll. Saber que el bankroll debe considerarse siempre como un dinero que puede permitirse perder es esencial. Nunca pongas en tu bankroll dinero que pretendías utilizar para otro fin.
Puesto que evita que te vayas a la quiebra, la gestión del bankroll en el póquer es tan crucial como un talento en sí mismo. Una estrategia de póquer tradicional sugiere que con el tiempo jugarás con apuestas cada vez más altas, lo que significa que te costará más entrar en una sesión de juego, pero el rendimiento potencial también será mayor. Te enfrentarás a jugadores cada vez más talentosos a medida que aumenten las limitaciones.
Podría ser prudente jugar a restricciones menores si está en una racha perdedora, ya que la competencia media de los jugadores con limitaciones más bajas los convierte en oponentes más sencillos para usted.
La cantidad de entradas también es crucial para gestionar los fondos. Un buy-in es la cantidad de dinero necesaria para jugar una vez en el límite actual. Los jugadores profesionales aconsejan gestionar su bankroll de forma que siempre tenga al menos entre 30 y 50 buy-ins.
Se aconseja que juegue con apuestas menores si pierde más del 30% de su bankroll en un periodo corto de tiempo. El límite más cómodo para jugar, en el que ganará más dinero, puede determinarse mediante la gestión del bankroll. Y siempre es prudente tener en cuenta que tener la oportunidad de jugar al póquer incluso con las apuestas más bajas es preferible a no tener ninguna.